martes, 20 de enero de 2015

Vale todo


Vale hacerse cargo con pasión de las decisiones.
Vale recibir una bebita diminuta y no saber qué hacer con ella.
Vale no entender al mes de nacida que se queda ahí para siempre, que tiene que seguir tomando la teta, que ahora la vida va a ser más las noches sin dormir, la plaza a la tarde o el yogur con zucaritas

Vale tenerla como hija única, única hija durante tres, casi cuatro años y seguir el protocolo jardín, cerámica, pintura, colonia, club.
Vale que se haya puesto celosa pero no tanto de su segunda hermana.

Vale que crezca, que se convierta en hermana mayor, en casi madre de sus hermanos.
Vale en la tormenta, cuando cargó a sus padres en sus hombros aunque a veces los haya tirado al piso con fuerza, con rabia.
Vale que haya protestado las últimas veces que recibió las noticias de sus hermanos dobles.

Vale que tenga su vida, que desaparezca el fin de semana, que tome sus decisiones.
Vale que a veces tenga una sonrisa lindísima, que se pase el día limpiando porque no se puede vivir en esta mugre.
Vale que sea para muchos de sus hermanos la mejor hermana.

Vale ver cómo pasa el tiempo a través de ella.
Vale verla acompañar y acompañarla
Vale verla irse de a poco.

Hoy hace veinte años que Vale, todo.

3 comentarios:

  1. Tan linda, Vale! Las madrinas de sus hermanitas también nos "entrenamos" con ella. Yo que estuve en la creación de la ya perimida pero tan celebrada institución "forrado de cajas para el jardín" hice un ensayo preliminar con ella, cuando forré horrorosamente ese cuaderno que Vale necesitaba y ella no paraba de repetir amablemente "no quedó tan mal" (era insalvable).

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  2. Tan linda institución que funcionaba además de prueba de madrinas.Es cierto el cuaderno ese quedó pésimo y la chica se esforzó por agradecerlo, pero no podemos decir lo mismo de su comportamiento actual (vasos rotos, saludos no correspondidos, etc.)

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  3. ¡y la musicalización de las cenas de año nuevo!

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